
Por: Leonardo Franco Arenas – www.latardedelotun.com——
En días pasados se hizo viral en los medios de comunicación y redes sociales, una carta del Senador Horacio José Serpa en la cual exponía a grandes rasgos el fastidio y tal vez las desavenencias con la dirección del partido liberal; sin ponerle muchos moños, con el Ex presidente César Gaviria Trujillo.
Utilizó en cada párrafo de la misma el # Liberalismo Actual, haciendo una referencia directa al presente que vive la colectividad y que se refleja (según él) en el lánguido papel que juega actualmente en el escenario político del país. Expone entre otras, la desconexión existente entre el partido y la ciudadanía, invitando a remozar las ideas y causas liberales. Esboza el doctor Serpa la necesidad de activar estrategias de cambio, de purga (catarsis, imagino que sobre errores pasados), innovación, apertura y servicio a la sociedad. En otro aparte, se sintoniza con la percepción del liberal de a pié y apunta sobre lo excluyente y discriminatorio que resulta el trato para unos y otros, sobre la imposición de reglas convenientes para unos y reglas de juego poco claras para otros y da como ejemplo el próximo congreso virtual del partido que fue, de acuerdo a sus palabras, manejado a conveniencia de unos pocos con estrategias amañadas en los directorios.
Por último denuncia las acciones del liberalismo actual de querer ser “una fábrica de avales para las próximas elecciones, ignorando el derecho de las mayorías.
Anuncia sin embargo al final de la misiva, una reunión con el director del partido, invocando la grandeza histórica del liberalismo, la humildad y la generosidad para sortear de la mejor manera la situación actual. Igualmente resume que si no se da un viraje a tiempo se acabará terminando en la pérdida de legitimidad y de peso en la historia.
Loable y valiente posición del Senador, poniéndole el pecho a esta situación y comprometiéndose a dar esa lucha interna sin dar un paso atrás.
¿Será el comienzo de un cisma dentro del partido liberal?