Partido Conservador.
Los candidatos de la lista por este partido a la Cámara 2022 – 2026 son:
Juan Carlos Rivera Peña # C101: Abogado, representante a la Cámara desde 2014, busca de nuevo la curul. Era de la línea de la casa Merheg. Fue concejal de Santa Rosa de Cabal y diputado de la Asamblea de Risaralda.
Manuela Gómez Murillo # C102: Abogada especialista en Economía del Desarrollo y Gestión Territorial, coordinadora de las juventudes en el partido conservador. De la cuerda política del senador Merheg y de la diputada Juliana Enciso
César Augusto Gómez Betancur # C103: Administrador ambiental, exconcejal de Pereira, ex candidato a la alcaldía de Pereira por el Centro democrático. De la línea de la casa Merheg
Sigifredo Salazar Osorio C104: Abogado con maestría en historia. Alcalde de Pueblo Rico, fue concejal de Dosquebradas, diputado de Risaralda y gobernador del departamento. De la línea de la casa Merheg.
La frase conocida “Pereira es liberal, pero Risaralda es conservadora” tenía sustento en la historia electoral del departamento. Veamos un poco, en 2010 a la Cámara el partido de Caro y Cuervo sacó 63.044 votos y dos curules, Diego Naranjo y Ricardo Valencia. En el 2014 el número de votos bajó a 54.910 pero continuó con dos curules, Mauricio Salazar y Juan Carlos Rivera. Para 2018 los resultados cambiaron y siguió bajando el total de votos, 49.384 a pesar que el censo electoral se había multiplicado en estos casi 10 años. Los conservadores perdieron una curul y solo llegó Juan Carlos Rivera con la mayor votación del departamento.
La lista de 2022 la podemos identificar por tres perfiles.
Primero, la representante de las nuevas generaciones de su partido Manuela Gómez, sin los respaldos políticos ni el músculo financiero de sus compañeros de lista, tampoco tiene una gran experiencia política, viene de la base azul y está haciendo camino. Puede ser una de las reservas para el futuro, aunque las oportunidades para figuras jóvenes en este partido son muy limitadas, basta observar quienes son los candidatos y los dirigentes de la colectividad azul, los jóvenes siempre se quedan en el camino sobre todo porque aquí pesan los apellidos. La posibilidad de llegar es nula.
El segundo perfil es el de un político con experiencia local, que sin muchos votos fue elegido al concejo y estuvo en liza a la alcaldía de la capital risaraldense. Ha militado en varios partidos, saltando de acuerdo a las conveniencias y oportunidades. Aunque tiene alguna imagen en Pereira y se ha movido durante esta campaña en los municipios, no cuenta con un reconocimiento amplio, ni con respaldos que lo hagan ver como una carta ganadora, podría se una figura para el futuro, pero queda la duda si para las próximas elecciones este jugando por otro partido y con otra aspiración. Posibilidades escasas.
En tercer lugar, están dos de la vieja guardia, compañeros en la asamblea de Risaralda y de la entraña de la casa Merheg, pero Rivera se distanció de su antiguo jefe, igual aconteció con Salazar cuando fue gobernador, pero volvió nuevamente manso al redil. Políticos de recorrido, con maña, que saben manejar la burocracia y la politiquería.
Salazar dejó más decepciones y rencores que amigos, su paso por la gobernación es un sambenito que le echan en cara permanentemente desde las comunidades, la mayoría de las personas que lo acompañaron en su campaña anterior, tomaron las de Villadiego y hablan pestes del ex. La “ventaja” es que el senador Juan Samy se echó al hombro la tarea desde hace un mes y le puso los tres diputados de esa casa política y hasta su gerente de campaña a pelearle la curul a su antagonista.
Rivera tiene la ventaja, puede ser un bumerang a su aspiración, que ha sido representante los dos últimos periodos, tiene experiencia en politiquería y mermelada, cuenta con burocracia en las alcaldías de Pereira, Dosquebradas, Santa Rosa y en entidades de orden nacional. También ha manejado las secretarías de desarrollo rural de estos municipios que le dan una ventaja por la exposición a las comunidades. Como político se sabe mover, pero hay dos aspectos para tener en cuenta, las dos veces que llegó fue como fórmula del senador Merheg, hoy día no cuenta con esa estructura, además está el desgaste normal de dos periodos, acentuada por la insignificante labor en el Congreso a favor del departamento. Diríamos que pasó con más pena que gloria, un parlamentario oscuro que solo se escuchaba por sus apoyos a temas en contravía del interés general de la nación. Esas fallas las cobran los electores.
Estos son los integrantes de la lista conservadora a la Cámara de representantes de Risaralda. ¿Alcanzará una o dos curules? Todo depende de la tendencia que están tomando estás elecciones que tienen otros protagonistas sobre el escenario.