
Por: Leonardo Franco Arenas – www.latardedelotun.com
- Localmente se ha dicho después de la demolición de la casa dedicada al “microtráfico”, en el marco de la cacareada lucha frontal de las autoridades contra este flagelo social, del tremendo oso del ministro Molano quien de manera oportuna visitó la ciudad y aprovechó este “gran logro policial”, para reivindicar en nombre de la Policía importante hecho en nombre del gobierno nacional. Cabe destacar que este no era un suceso extraordinario para que ameritara la presencia de todo un señor ministro de defensa, como tampoco, vale decirlo claramente, que sea el dueño del oso, este monumental plantígrado tiene como padre la policía nacional y madre la Alcaldía municipal. Que descachada tan descomunal.
- Con respecto a los Oscar considero que:
- Es relevante la participación de algunos artistas colombianos en la gala celebrada en Los Ángeles cantando algunos temas de la película Encanto, ganadora de la estatuilla en la categoría de película animada, hasta ahí. Tratar de vender la idea que Colombia ganó algo, no es honesto como tratan de hacerlo parecer algunos medios de comunicación. Reconocemos que la película se basó en algunos elementos tradicionales y ciertos detalles culturales del país, también tuvo algunos actores en las voces en español, solo eso. Hablan de un gran triunfo nuestro, falso.
- La reacción del Príncipe del Rap, golpeando al presentador. Algo inédito en un acto de esta magnitud, trasmitido en directo por TNT a numerosos países. ¿Quién juzga? ¿Quién señala a Smith? Pero ¿es justificable esa actitud violenta? ¿Cuál es el mensaje? El varón encabronado porque le ofenden a su mujer reacciona sin importar las consecuencias. En donde queda el autocontrol y la solución de las discrepancias de manera pacífica y civilizada. Cuál es el mensaje a aquellos hombres que ahora tendrán un punto de referencia para lavar la honra de sus mujeres de manera violenta o de algunas mujeres que reclamarán de sus maridos una reacción acorde a la actuación de Will, para sentirse protegidas. Grave. La participación de estos payasos (comediantes presentadores) en este tipo de eventos, pareciera que les da carta blanca, licencia ilimitada para ofender y burlarse de cualquiera, sobran.
- Liberalismo, parece ser que aparte del jefe único, el indiscutido “césar” del partido y algunos senadores reconocidos caciques regionales, las mayorías del partido entre ellos la bancada en la Cámara de representantes, estarán cuando menos escuchando a Petro y al Pacto histórico para encontrar puntos de encuentro a una eventual unión en primera vuelta. El cómo es difícil, pero ya se tiene dilucidado el quienes y el cuándo. Es la opción para los liberales de seguir vigentes en el escenario político colombiano y no acomodados en la galería mientras un actor en decadencia trata de coordinarlos para que acompañen y aplaudan lo que él ordena.
- Alberto Ríos Velilla es una vaca sagrada, su poder y el de su cónyuge, la uribista Darcy Quinn, es evidente. En los últimos días estalló un escándalo que salpica a la fiscalía y a esa familia, se les señala de manipular para el traslado de una fiscal que llevaba una investigación en contra de dos hermanos y su hijo, exconcejal de Bogotá, para el Putumayo. Se presume que fue castigada fulminantemente, luego de ser advertida por sus superiores y por el rector de la Sergio Arboleda que no continuara la investigación. Es el modus operandi de la bandola que maneja a Colombia, se han apoderado de la mayoría de las instituciones del Estado para actuar a su acomodo. En Pereira las tarifas de la energía y los cobros por un sinnúmero de ítems que el usuario no entiende, siguen hacia arriba.
- A Lara Bonilla se le volvió un estropicio su descanso eterno. La dupla Fico – Lara, la entiende uno por el lado Gutiérrez que es un oportunista, por el otro, solo se puede pensar que es ambición. Afortunadamente conocimos a Lara, como es realmente, ahora, sus pérdidas electorales serán grandes, sus ganancias pírricas. Desde ya perdió sobre todo el respeto y la consideración que se tenía por su padre. Los herederos de Lara y Galán no aciertan una.