LA SABANDIJA INMUNDA DE DANIEL CORONELL

Por: Felipe A.Priast – Facebook  / www.latardedelotun.com _________

Desde que empezó la guerra entre Israel y Hamas ando con el termómetro en la mano viendo a ver en dónde está todo el mundo en este conflicto. Aquí no puede haber posiciones ambiguas, porque ser ambiguo en estas circunstancias es apoyar disimuladamente la barbarie, y la barbarie no puede ser apoyada.

Por aquí le he medido el aceite a amigos y contactos, y de manera más extensa, también le he medido el aceite a políticos de todo el mundo, periodistas y personajes de relevancia mundial, para ver en dónde están en este asunto.

Por aquí he oído a gente de Barranquilla decir “es que en Barranquilla judíos y árabes vivían en paz en Curramba y todo chevere”.

Con esa anécdota no basta. Que judíos y turcos en Barranquilla fueran amigos no explica, ni justifica, ni convalida, lo que los judíos están haciendo en Gaza.

Otros me han salido más ambiguos de lo que creía: “Cagada lo que pasa en Gaza pero yo no voy a dejar de tomar café con mis amigos judíos, ellos no tiene nada que ver”. Lamento decirles esto, pero si tiene que ver, en especial si tus amigos judíos son sionistas. Si tú eres amigo de un sionista de esos que valida lo que hace el ejército israelí en Gaza, loco, ábrete de aquí porque a mí no me interesa tu amistad. Yo no soy amigo de amigos de sionistas.

Esto no es capricho, es una posición VITAL para proteger mi humanidad, y la humanidad alrededor mío. Cualquier amago de intentar entender lo que hace Israel en Gaza, no cabe en este caso, porque para proteger a la humanidad hace falta un frente unido de todos los que poseemos humanidad. Si tú dejas una rendija medio abierta, por ahí se va a meter la barbarie y nos va a joder a todos. Mi decisión no es política, ni determinada por motivos sociales, como la de los ejemplos expuestos arriba, sino por un profundo sentido de Humanidad. Si Palestina muere, la Humanidad está en riesgo, punto. Ahí no cabe que si mis amigos judíos, que yo una vez tomé cerveza con Ari Rosenblaum que es un bacán, que yo jugaba squash con Niki Cohen, a mí eso me sabe a mierda. Si Ari Rosenblaum y Niki Cohen son sionistas y tú sigues siendo amigo de ellos, ábrete loco, que por acá no te quiero de contacto. En mi muro no va a sobrevivir nadie que apoye a Israel en esta causa, sin excepciones.

Y así como le he estado midiendo el aceite a todo el mundo en este asunto, también le he estado midiendo el aceite a los medios, no solo a los medios colombianos, sino a todos los medios del mundo. El NY Times y el Washington Post, por ejemplo, perdieron conmigo. Ya venían caídos desde su cubrimiento sesgado sobre la guerra en Ucrania, pero con su apoyo irrestricto a Israel, se acabaron de hundir. En estos momentos solo leo el NY Times para ver que más le esconden a sus lectores, porque yo las verdaderas noticias de Ucrania y Gaza las recojo de otras fuentes más creíbles y objetivas.

Y de CNN mejor ni hablemos. Esa cadena de noticias es el sionismo tapado más patético que existe. De los medios grandes del mundo que yo leo, solo pasa el corte The Guardian, el periódico británico.

En Colombia las líneas de apoyo en esta guerra están dadas por la política local. El Uribismo en bloque está con Israel, porque animales apoyan animales, eso está claro.

Para mí Semana no cuenta, porque, no solo es una basura que ni siquiera califica como medio de información, sino que además es de un judío uribista, ¡imagínense esa vaina! Eso es como ser Netanyahu al cuadrado.

Y el resto de medios del país, ya bien de manera abierta, ya bien de manera subrepticia, apoyan a Israel, por una simple razón: o son medios que no quieren contrariar a los americanos, los principales aliados de los israelíes; o son medios directamente controlados por los americanos por razones de desinformación.

En esta última categoría cae “Cambio”, una revista que estoy seguro es un instrumento de los americanos en Colombia. Esa es la razón por la cual Cambio no ha tomado una posición clara sobre la guerra en ninguna instancia. Han pasado de agache, seguramente, porque los americanos los han instruido para que sea así. Cualquier medio que critique a Israel, de inmediato cae sobre la lupa de los gringos, porque los gringos son los que les están dando las armas a Israel para que maten palestinos, de la misma manera que le dieron plata al gobierno de Uribe para que ejecutara falsos positivos (las famosas tulas con plata de las que tanto he hablado por aquí en el pasado).

Pero los acontecimientos están tomando un giro adverso para Israel y los Estados Unidos en recientes semanas, y ahora es cuando salen las “ratas” para tratar de acomodarse a la nueva situación. La Corte Penal Internacional le solicita a un panel de jueces que emita boleta de captura contra Netanyahu y su ministro de defensa, y la Corte de Justicia Internacional, la corte de la Naciones Unidas (ONU), le exige a Israel que pare la operación en Gaza. Fuera de eso, el movimiento estudiantil de las principales universidades del mundo, pero en especial, de los Estados Unidos, le ha sacudido la consciencia a medio mundo, y los que antes apoyaban a Israel abiertamente o en silencio, HUELEN QUE EL VIENTO ESTÁ CAMBIANDO DE DIRECCIÓN y ahora buscan acomodarse para ponerse del lado que corre el viento. Ese es el caso de Daniel Coronell, quien durante más de 6 meses no le ha dado para decir nada en su puta revista taimada para criticar a Israel, pero ahora que el viento cambia de dirección, esa rata inmunda, manipuladora y maquiavélica, intenta ponerse a barlovento para ir con la dirección del viento.

Esa columna que ha sacado hoy, titulada “Raquel”, que es el nombre de su hija, es la bajeza periodística más rastrera que he leído en mucho tiempo. Coronell está usando a su hija víctima de leucemia para ponerse en la dirección del viento que ahora sopla en contra de Israel y los Estados Unidos, sin tener que hacerlo el mismo. Es decir, en vez de él mismo escribir una columna condenado lo que hace Israel en Gaza, ese judío triple-hijueputa y taimado se mete en el cuento triste de la leucemia de su hija para usar las palabras de esta para hacerlo.

Yo celebro que esa pelada haya tomado esa posición como directora de “The Crimson”, la revista de Harvard que ella dirige -o dirigió-. Lo que yo no puedo aceptar es que ese hijueputa de Daniel Coronell haya usado a su hija enferma de cáncer para ahora acomodarse a los nuevos vientos. Ahí se ve claramente que él no quiere llevarle la contraria a los americanos, sus amos y los que controlan la posición editorial de la revista de la que él es socio. Pero como “huele” que el viento está cambiando, ahora el re-malparido usa una columna de su hija en la revista de Harvard para acomodarse y parecer como que él siempre estuvo del lado de los palestinos, a pesar de ser judío.

¡Sabandija hija de puta! ¿Tú en verdad creíste que nadie se iba a dar cuenta de lo que estás haciendo, judío taimado recontra-hijueputa?

¿Cómo vas a usar la enfermedad de tu hija, y la bondad de tu hija, y las ideas de tu hija, para ahora venir a acomodarte? ¡No joda, loco, hay que ser un recontra-malparido con todo y ropa para usar la enfermedad de un hijo para acomodarse profesionalmente ante una situación en la que previamente se había tomado la posición opuesta! Coronell, para salvar su imagen de periodista SIEMPRE DEL LADO BUENO, vende a la madre para lograrlo. En este caso, ese gusano de cloaca putrefacta está usando a su hija que padece leucemia para hacerlo, ¡o sea, ese malparido no tiene límites!

Habría sido preferible que hubiera vendido a la madre que haber usado así a su hija enferma.

Por aquí hay un poco de guevones que todavía siguen y admiran a Coronell por su abierta posición anti-Uribista, pero con el tiempo yo me he dado cuenta que esa fue otra maniobra sagaz suya para poder hacer lo que hace, que es, servirle de conducto de opinión a los americanos e influenciar la posición de estos en Colombia. Coronell, rápidamente en la era Uribe, se dio cuenta que Uribe era el instrumento perfecto para convertirse en un periodista taquillero en Colombia, y acertó, porque Uribe es un asesino y un monstruo. Entonces, con el flanco de aceptación conquistado, porque en Colombia todo el mundo celebra sus columnas contra Uribe, el man empezó a meter su agenda haciéndose el marik, que es la misma agenda de los americanos. Cuando Coronell habla, está expresando la posición de los gringos, esa es la verdad. Así fue como su hija, entre otras cosas, debió entrar a Harvard y convertirse en presidenta de The Crimson. A eso no se llega fácil, y algunos benefactores tuvo que tener para que le recibieran a su pelada en Harvard, y con esto no estoy diciendo que la pelada no tenga los méritos para estar ahí, eso no lo sé ni es el punto de esta nota.

Lo que sí sé, y que veo con claridad, es que ese gusano taimado está usando a su hija para ponerse en la dirección del viento, y yo no voy a dejar que ese hijueputa se acomode.

Niños volando en pedazos, mujeres llorando por sus hijos muertos. Hambruna, sed, vicisitudes, dolor, sufrimiento, y Coronell veía esas noticias todos los días desde su confortable oficina en Univisión y nunca dijo nada.

Se le voltea el cotarro a Israel y a los Estados Unidos, y sale este hijueputa y echa mano de su hija enferma para acomodarse…

Yo no sé si ese judío re-malparido se da cuenta de esto, pero lo que ha hecho es lo mismo que hacen esos avivatos que tienen un hijo en silla de ruedas y salen a pedir plata en la calle empujando la silla de ruedas con el hijo con un letrero que dice: “Ayúdanos,  no tenemos que comer”…

Eso que ha hecho ese hijueputa no tiene perdón de Dios.

Y, ciertamente, no va a tener el perdón mío nunca…

Y que le quede claro a todo el mundo: ya es tarde para acomodarse. El que no dijo nada en diciembre del año pasado, cuando los vídeos de niños desmembrados en Gaza empezaron a rebotarse en Tik-Tok, que no venga ahora a hacerlo, porque le voy a dar el mismo palo que ahora le estoy dando a Coronell. Ahora ya es tarde. Vete a jugar squash con Niki Cohen o a tomar café con Myriam Rosenblaum, aquí no vengas a acomodarte, hipócrita hijo de puta, que yo te voy a sacar los verdaderos colores cuando lo intentes…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *