Muy preocupante la situación de seguridad en la Perla del Otún y el Área metropolitana Centro occidente, los homicidios, desapariciones y masacres están disparados los últimos meses. Las acciones violentas se han incrementado dramáticamente en Pereira, Dosquebradas, Santa Rosa y La Virginia y están prendidas las alarmas por lo que parece ser resultado de vendettas entre bandas criminales que se disputan el negocio del microtráfico. Un reacomodo de las estructuras delincuenciales luego de la muerte de varios de los líderes y disputas por la venta al menudeo de estas substancias. Se ha hablado desde hace un tiempo del enfrentamiento de poderes entre las grandes bandas que hacen presencia en esta zona del país, resultado del rompimiento de acuerdos para respetar los sectores de injerencia directa de cada una.
Tanto las autoridades como las administraciones locales guardan silencio resguardándose tras las cortinas de grandes eventos, reuniones sociales y presencia permanente de los mandatarios influencers en las redes sociales. Con estas estrategias pretenden ocultar lo que está sucediendo, una guerra interna entre el Clan del Golfo y La Cordillera como lo expresó un concejal del municipio industrial.
De otra parte existe un tema muy delicado y recurrente, parece que se volvió paisaje, la desaparición de personas en estos municipios con el agravante en el tiempo, que ya no son solo niñas y jovencitas, se ha ampliado a otros segmentos de la población y cada día se conocen decenas de denuncias por hechos similares, ¿Qué pasa’? ¿Qué está sucediendo en esta región? ¿Explotación sexual? ¿Tráfico de órganos? ¿Esclavitud? Muy grave lo que está ocurriendo y los “mandatarios” pendientes de las redes.