OLIGARQUÍA, “MÁTAME SUAVEMENTE…”

Por: Lucero Martínez Kasab. – La Nueva Prensa / www.latardedelotun.com_____

La más cautivante voz femenina del soul negro, la que me arrastra a la nostalgia con su cantar llevándome a los frescos días de diciembre de mi infancia Roberta Flack, se ha ido de este mundo cantando Killing me softly with his song, mátame suavemente con su canción; en otras palabras, destrúyeme de una manera dulce, sin apenas darme cuenta, acaba conmigo sutilmente.

Era 1971 cuando el director de cine Clint Eastwood usó la versión de Roberta The first time ever I saw your face, La primera vez que vi tu rostro, como banda sonora para una de sus películas, la que ella solía cantar tocando el piano, inmediatamente, su voz la convirtió en una estrella. Dos años después cuando Roberta iba en un avión escuchó la canción Killing me softly with his song quedando prendada de su letra y su melodía tomándola para ella, así, en 1973 ganó el Premio Grammy a la Grabación del Año y, a la Mejor Intérprete Femenina, fue su consagración. Ningún otro artista ha podido cantar esa canción como Roberta que, mientras canta, muere suavemente; que al contar la historia acaricia y fallece, expresando el goce estético como un dulce dolor ante un joven que entona una letra que ella siente como su vida misma. Es el misterio del arte que sólo la paradoja se acerca un poco a definirlo.

¿Pero de qué vale una voz con la dulzura de un lamento de siglos como el blues o el jazz si perteneciera a alguien consumido por el poder, egoísta y explotador? Su encanto se disiparía, como sucede tantas veces, hasta que ese arte pierde el influjo sobre nuestros sentidos. Felizmente, no es el caso de Roberta Flack, ella, además de haber tenido esa voz de tesitura tan fascinante, fue una defensora de los derechos civiles en su natal Estados Unidos, gran amiga de la emblemática Angela Davis y del reverendo Jesse Jackson; para mí eso la hace mucho más adorable.

Roberta murió el 24 de febrero pasado, desde ese día hasta hoy no he dejado de escuchar la dulzura de su mátame suavemente sin encontrar la oportunidad para rendirle homenaje por haber acompañado los días más felices de mi adolescencia, hasta que este coro de medios masivos de comunicación,  Fiscalía, Procuraduría, Consejo de Estado, Cortes de Justicia y tantos miembros del Congreso persisten en el propósito de un golpe blando contra el gobierno del presidente Petro desmoralizando nuestras esperanzas …, sentí, entonces, que esta oligarquía que nos ha matado a golpes, a balas, también nos ha sumido en una muerte agónica desde hace dos siglos. Nos matan con cada ley que sólo beneficia a la élite, saboteando la ejecución de las reformas que millones de colombianos anhelamos.

Mientras Roberta seguía cantando acompañada de su piano esa letra tan inusual Ahí estaba ese muchacho, extraño ante mis ojos, rasgando mi dolor con sus dedos, cantando mi vida con sus palabras veo la imagen del joven fotógrafo Pablo Grillo tendido inmóvil en el pavimento junto a su cámara, víctima de la brutalidad policial en Argentina; otro joven documentando la realidad con su arte, narrando nuestras vidas y las de nuestros países, hasta que la represión lo calla brutalmente.

El bloqueo institucional que la oposición ejerce sobre el gobierno del presidente Petro es porque él ha entendido la vida de la clase popular como su vida misma. Ha expresado con sus palabras y conocimiento lo que el pueblo ha sentido toda la vida, un morir lento sin redención. Pero, él no se amilana, por el contrario, persiste, con la Constitución en la mano -la que la oligarquía sí infringe permanentemente-, en sacar a Colombia de la opresión, liberarla. Por eso llamó al pueblo a una consulta popular ante el despótico engavetamiento de la reforma laboral por parte de un reducido grupo de congresistas. La gente recibió alborozada la noticia de que su opinión contaría para despejar el camino de las reformas.

El presidente Petro al convocar esa consulta busca romper el embrujo que la oligarquía le ha hecho al pueblo. Para que despierte del marasmo de este desaparecer lento de la vida sin haberla vivido plenamente a través de las mentiras, de la tergiversación de la democracia, volviendo malo lo que es bueno y bueno lo que es malo. De modo que la respuesta a la consulta se volverá un mandato porque el pueblo antecede a la Constitución. Gracias, Roberta, por tu sensibilidad infinita que nos mata suavemente en estos tiempos de codicia, tú, defensora de los derechos humanos sabes que sólo en el arte se permite morir así porque, es la más sublime expresión del gusto estético, pero en la política el ser humano lucha a muerte por su vida, así sea un esclavo que, con nostalgia, siente que es libre con tu voz.

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