
Vileza moral se define como: “Acto o comportamiento que viola gravemente la norma aceptada por una comunidad” y se describe como una acción de bajeza, perversión o corrupción contra otro individuo o la sociedad en general. Violenta las normas y orden de las cosas, atentando contra la dignidad, el respeto y la integridad de los demás.
Lo que está pasado en el país, no solamente con ataques bárbaros a las reformas sociales propuestas, desinformación continua por parte de los medios corporativos, falsas narrativas que sin pudor alguno inventan para desprestigiar al gobierno, ahora vemos con asombro, el manejo criminal a los medicamentos, la pésima atención a pacientes y en general el deplorable servicio de salud, estrategias de las grandes corporaciones dueñas del negocio.
Lo anterior hace parte de una maniobra perversa para minar la imagen, la percepción positiva del presidente y su gabinete, todo parece indicar que es un plan urdido de manera detallada, cabe recordar, que el anterior superintendente de salud había puesto en evidencia este alevoso hecho contra los más necesitados, especialmente personas mayores. Existen antecedentes sobre esta inhumana práctica por parte de los dispensadores de medicinas.
Audifarma es reincidente en este delito y debe ser sancionada, hace parte del plan de los grandes monopolios para tratar de debilitar este gobierno democrático, para volver a sus anteriores malas prácticas de corrupción. 113.000 unidades de insulina almacenadas en una de sus bodegas en Bogotá y la respuesta en los dispensarios de medicamentos es: No hay existencia, agotado etc.
Por lo tanto, es un deber exponer estas macabras prácticas a la opinión pública, que se enteren quienes son los verdaderos culpables de esta situación. En consecuencia, se hace imperativo que los organismos de control y de justicia impongan fuertes castigos a estos mercaderes de la muerte, seres deshonestos, inmorales y perversos que atentan contra la dignidad, el respeto y la vida de los colombianos.
Minsalud aclara a la opinión pública que el Gobierno ha girado más de 1.6 billones de pesos en los últimos cinco meses a las principales distribuidoras de medicamentos, incluyendo Cruz Verde, Audifarma, Disfarma y Helpharma.
Los siniestros poderes a la sombra manejan los hilos de un estado que ha estado cooptado por décadas y a los que solo ahora, en este gobierno se les han puesto las talanqueras necesarias para desmontarles el rentable negocio con la salud y la muerte.
¡Que se sepa la verdad!