Por: Leonardo Franco Arenas – www.latardedelotun.com
____ La derecha ha puesto de moda esta palabra, es utilizada para manosear y tergiversar algunas propuestas del candidato de la otro orilla, sus conocimientos en temas económicos y la intención de superar los problemas sociales que aquejan al país, ahora, tratan de desviar la atención pública mediante triquiñuelas y haciendo mofa sobre los temas más importantes. En medios de comunicación, redes sociales, reuniones normales y conciliábulos políticos, ha hecho carrera esta palabra con la intencionalidad expresa de desviar la atención sobre materias sustanciales en el futuro de Colombia.
Ellos afirman que van a expropiar tierras, empresas, capitales (sabemos de hecho que, muchos de estos han sido expropiados privadamente hacia el exterior) y tratan de crear pánico económico hasta de los compatriotas más pobres, con una diseñada y agresiva campaña de medios.
En los últimos días y luego del debate realizado por Semana y El Tiempo, inmediatamente después de las elecciones del 13 de marzo, allí quedó claro quién es quién en la carrera presidencial por conocimiento, capacidad, talante y estatura de estadista, dándole una verdadera cátedra a los otros debatientes. Sin muchos argumentos ese mismo día el señor Fico (¿tiene presentación hablar de un presidente Fico? ¿Tan mal podrá estar el país?), puso en boca y en los medios de comunicación esta palabra, aterradora para cualquiera, dando inicio a la manipulación mediática.
Lo anterior sería muy grave si fuera algo serio para tener en cuenta, pero viniendo de estos personajes a quienes el país ya conoce, sabe de sus maldades, del abuso, la distorsión de la información y la realidad, no pasa de ser una pretendida burla a la realidad nacional. Poca credibilidad ha tenido esta herramienta de miedo que procuran utilizar para desviar la atención de lo importante, el futuro.
EXPROPIADOS si hemos existido en Colombia durante más de doscientos años, no es un chascarrillo o una cortina de humo, es el tiempo de vida republicana donde las mismas familias han detentado el poder, adueñándose de la tierra, el capital y el poder político, mediante la expropiación exprés o en el tiempo. Han expropiado también, la libertad, la salud, la educación, el trabajo. Hoy tratan de expropiar la capacidad de razonar, la dignidad y la realidad, no les importa cometer cualquier arbitrariedad ni acto delincuencial, asumen que la justicia y los órganos de control están de su lado y con el cinismo y el descaro propio de las más duras dictaduras cometen sus fechorías de frente, y lo peor, cuando se ven descubiertos se amparan en la supuesta, para ellos, estupidez de rebaño de la mayoría, pretendiendo demostrar otras realidades. En el colmo de su arbitrariedad y locura dicen que quienes planearon y operaron el fraude electoral fueron los contrarios, la mayoría. Inaudito el grado de descomposición de esta horda de transgresores, bandidos, es más preciso.
El temor de ellos a estas alturas, es que saben que el futuro no tiene reversa como se pudo palpar el 13 de marzo, por más patadas de ahogado que den, el país tomó otro rumbo y ellos, NO PASARAN.
No seremos por más tiempo EXPROPIADOS.