El resultado de las elecciones del 29 de mayo, aunque fue aceptado por los candidatos y todo continuó en una apacible tranquilidad, personalmente me generó muchas dudas sobre la transparencia de este “ejercicio democrático”, más, cuando no se contó con una auditoría internacional que había sido planeada desde el tongo del 13 de marzo. La registraduría dejó pasar el tiempo y el señor Vega se hizo y me perdonan la expresión el “wuevón” enredando la piola por otros lados, guardando silencio y sacándole el cuerpo a su responsabilidad en este grave hecho. Con miras a la segunda y definitiva vuelta donde no solo está en juego un resultado electoral, si no un cambio estructural de la forma de gobierno y de modelo económico del país, vuelve a suceder exactamente lo mismo.
Estoy casi seguro que Petro ganó en primera vuelta, el resultado fue manipulado mediante un programa diseñado para tal fin, se están conociendo las evidencias. Escribí sobre las serias dudas de estos resultados en GACETILLA del 31.05.22 www.latardedelotun.com
“8. Algunas cosas al final: Uno, cuando menos es muy sospechoso el promedio de los resultados del domingo, desde el boletín # 6 de la Registraduría a las 4:35 pm mesas informadas el 9,28%, hasta el boletín # 68 a las 9:45 pm, mesas informadas el 99,99%, que las cifras solo variaran un 1% en los candidatos, casi inamovibles. Algo extraño. Dos, Hernández se apoderó de la votación en el centro y el oriente del país, las mismas regiones en las que ganó Duque en 2018, sin hilar muy fino parece extraño que salvo algunos departamentos donde las maquinarias están aceitadas, haya obtenido grandes votaciones en lo que se conocía anteriormente como los territorios nacionales, zonas donde la trasmisión de datos, la conexión a internet es deficiente y casualmente donde es más difícil ejercer un control por parte las veedurías ciudadanas. Tres, ahora parece que el denostado registrador es un héroe para medios y políticos, los temores denunciados días antes, el intento de fraude del 13 de marzo, la falta de una supervisión internacional de los resultados y las dificultades de algunos veedores internacionales para ingresar al país y ejercer su labor, quedaron en el olvido. Algo hiede”.
Ahora, de acuerdo a una noticia de El Colombiano de Medellín el temor se acrecienta:
“El magistrado del Consejo Nacional Electoral (CNE) Luis Guillermo Pérez negó las afirmaciones del registrador nacional Alexander Vega sobre la posibilidad de contratar una auditoría internacional para la segunda vuelta de las presidenciales, que se votarán el próximo 19 de junio.
Vega había confirmado en la mañana de este miércoles que sí se iba a realizar la contratación e incluso, señaló que no se iba a devolver el dinero girado por el Ministerio de Hacienda para este fin. Sin embargo, Pérez aseguró que, por lo menos por parte del CNE, no se adelantará la diligencia.
“Quiero advertirle al país que no habrá una auditoría a cargo del CNE, dados los requerimientos en los que ha insistido la Procuraduría General de la Nación de que no puede haber una doble contratación y que el objeto de este contrato tiene que ser distinto al que celebró la Registraduría con la firma McGregor”, dijo Pérez en un video compartido en su cuenta de Twitter.
“Se hace inviable a esta altura que haya una posibilidad de tener una auditoría internacional a cargo del Consejo Nacional Electoral, siendo nosotros el máximo órgano de inspección, control y vigilancia del proceso electoral”, explicó el magistrado, quien destacó que la Contraloría también estaba solicitando que el objeto de este nuevo contrato fuese distinto al que tiene McGregor”. El Colombiano 01.06.22.
Mañosos de siete suelas, los sinvergüenzas de profesión tratan por todos los medios de cerrarle la puerta a la esperanza de esta Nación y continuar con este narcoestado corrupto e impune.
Los organismos internacionales deben ayudar decididamente a que esto no suceda, que su compromiso con el fortalecimiento de la democracia en Colombia sea verídico y no una simple y nimia declaración, ¡la sociedad colombiana alerta¡ NO PASARÁN.
