
EDITORIAL – 14.08.23
CHISMES, ESPECULACIONES Y MENTIRAS
La triada que compone la matriz de desprestigio y desinformación utilizada por quienes, desde los micrófonos y escritos, están empecinados en buscar la caída del gobierno del presidente Petro, son, chismes, especulaciones y mentiras. Tal cual lo expresa en un video filtrado, la no muy cuerda senadora Paloma, sobre la primera parte de esta aberrante campaña. Bien lo dijo hace unos días el primer mandatario, “el cambio tiene gobierno, pero no tiene el poder” con esta frase grafica perfectamente las dificultades para sacar adelante, no solo su plan de desarrollo, incluidas las reformas, si no también, un nuevo modelo social inclusivo y equitativo para combatir los grandes males del país: Corrupción, violencia, desigualdad social y narcotráfico entre muchos. La lucha frontal no solo es en contra de estas históricas costumbres, si no contra el viejo país, ese narco país que fue cooptado por distintas camarillas que al final se unieron: económicas, políticas, delincuenciales y paramilitares que firmaron lo se llamó el pacto de Ralito, pacto secreto firmado el 23 de julio de 2001 en la finca del paramilitar Salomón Feris Chadid, alias ‘08’ en el corregimiento de Santa Fe de Ralito, en Tierralta, Córdoba, “la refundación del país, para crear un nuevo pacto social y construir un nueva Colombia”. Si bien este oculto acuerdo se firmó en 2001 en el gobierno de Andrés Pastrana, entró en plena vigencia a partir del 7 de agosto de 2002 entenderán el por qué.
En el escenario político de hoy los chismes baladíes, de alcoba, de vecinos, del “corre ve y dile” son los que dominan el escenario de las noticias nacionales en las grandes cadenas. Hablan de mozos, de amantes, de cirugías, de vecinas y de gustos sexuales. Existen medios con una falsa identidad de imparcialidad, de seriedad y rigurosidad en sus investigaciones, con figurines periodísticos que han pasado de agache ante la matanza, corrupción y brecha social de la nación. Dominan los titulares temas cosméticos, faranduleros, auspiciados por las pautas de los grandes conglomerados económicos a quienes aprietan de cuando en cuando dando a conocer escándalos que luego pierden vigencia y son traspapelados a medida que estos emporios ceden y pagan la extorsión de estos filibusteros cómplices del engaño. Especulan sin ningún rubor, como dicen los francos costeños “les vale verga” por aquello de “¿entonces el poder para qué?” Marranean de la mano de los dueños del país. Desdicen, interpretan a su acomodo todo lo que pueda perjudicar al gobierno actual, suponen sin llegar a conclusiones, teorizan sin pruebas y condenan como jueces.
Basados en mentiras, bulos o embustes de diferentes calibres los grandes medios pertenecientes a esta élite económica, políticos de derecha, (gente de bien y buenos muchachos) gremios y muchos arribistas, pobres en su mayoría, no tienen ningún reparo en lanzar infundios a diestra y siniestra menoscabando la imagen del presidente y su gobierno, buscan crear un clima de miedo, inseguridad y caos, el bombardeo constante es una matriz implantada para desarrollar el plan de descredito del actual gobierno, todo astutamente ligado en un entramado del cual hacen parte estos grupos y en la base, las bodeguitas uribistas y el blanco la nación colombiana.
Abundancia de Toños pueblo nacionales y grupos delincuenciales de diferente estirpe haciendo el sucio trabajo. Atentos, sobre todo el 29 de octubre.