DE LAS CONIFERAS, LOS EUCALIPTOS  Y EL FANTASMA DE LA DEFORESTACION.

Por Epifanio Marín Ríos / www.latardedelotun.com _________

Hace pocos días, nuevamente escuché la perorata que señala a las coníferas y a los eucaliptos de ser especies «dañinas al ambiente» y adicionalmente leí un artículo donde algún personaje planteaba que la restauración sólo podría hacerse con especies endémicas, vaya lío.

Llama poderosamente la atención que nunca recibí comentario alguno, ni positivo ni negativo, sobre una publicación que hicimos con mis amigos Cristina Galvis y Arbey Alfonso Acosta, que da fe del testimonio directo acerca de las experiencias positivas que tenemos en Risaralda en procesos de restauración asistida utilizando un buen número de especies nativas e introducidas; entre ellas las dos mencionadas al comienzo de este escrito. Algo similar ocurrió con un breve escrito que publiqué años atrás que me atreví a titular…Las coníferas, exóticas en su propio mundo?…esto haciendo alusión a aspectos interesantes como son su aparición hace buen rato, ocupando prácticamente todo el planeta y la presencia en nuestro país de varios géneros de estas.

La cantaleta finalmente va orientada a resaltar la importancia de coníferas y eucaliptos para proteger; de manera indirecta, los bosques naturales al proporcionar las materias primas y otros bienes que, de no contarse con las plantaciones, tendrían que obtenerse de los bosques que irónicamente aún subsisten gracias a las fuentes alternas de recursos naturales representadas en las diferentes especies de pinos, cipreses, tujas, araucarias, eucaliptos, urapán, gmelina, acacias, neem, teca, cedro rojo de la India y otras muchas. Eso sin contar los géneros que se plantan en el arbolado urbano y que diríamos de nuestra base agropecuaria.

De hecho en el transcurrir de mi vida profesional tuve fuertes discusiones y controversias sobre estos asuntos, las cuales creí superadas , pero el fantasma sigue vivo…en este sentido vale la pena dejar abierta la discusión dejando claro que no represento intereses de nadie, sino que este escrito va orientado a reflexionar de manera tranquila, acerca de la conveniencia o no de reconocer el importante papel de las especies vegetales en el ejercicio al cual nos llama la madre tierra para mantener la vida sobre el planeta, independiente de su origen, sin que con esto pretenda en momento alguno desconocer los impactos generados esencialmente por los errores en la localización de plantaciones comerciales, lo cual trasciende a asuntos relacionados con los conflictos por los usos del suelo, yerros o debilidad en el ejercicio de zonificación del territorio, a través de los instrumentos de planificación y otros aspectos de la política agropecuaria que ha regido en el país…

Para cerrar abro algunos interrogantes ¿Sabemos de manera exacta la relación deforestación vs plantaciones forestales?, ¿tenemos claro cuantas hectáreas de bosques naturales se han reconvertido a potreros y desarrollo agrícola?, ¿conocemos la triste cifra de lo que subsiste de bosques secos y páramos?…¿se tiene clara la tasa de producción de las plantaciones forestales vs los bosques naturales?  ¿Tenemos claro cuantas de las especies de uso agrícola y pecuario son introducidas y cuál ha sido históricamente su impacto sobre los ecosistemas naturales?

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